EL INFIERNO

EL INFIERNO

por | Abr 30, 2023 | COLABORADORES

😈

Termodinámica del Infierno

La siguiente pregunta fue hecha en un examen trimestral de química en

la Universidad de Toledo. La respuesta de uno de los estudiantes fue tan

«profunda» que el profesor quiso compartirla con sus colegas, vía

Internet, razón por la cual podemos todos disfrutar de ella.

Pregunta: ¿Es el Infierno exotérmico (desprende calor) o endotérmico

(lo absorbe)?

La mayoría de estudiantes escribieron sus comentarios sobre la Ley de

Boyle (el gas se enfría cuando se expande y se calienta cuando se comprime).

Un estudiante, sin embargo, escribió lo siguiente:

«En primer lugar, necesitamos saber en qué medida la masa del Infierno

varía con el tiempo. Para ello hemos de saber a qué ritmo entran las

almas en el Infierno y a qué ritmo salen. Tengo sin embargo entendido que,

una vez dentro del Infierno, las almas ya no salen de él. Por lo tanto, no

se producen salidas. En cuanto a cuántas almas entran, veamos lo que

dicen las diferentes religiones. La mayoría de ellas declaran que si no

perteneces a ellas, irás al Infierno.

Dado que hay más de una religión que así se expresa y dado que la gente

no pertenece a más de una, podemos concluir que todas las almas van al

Infierno. Con las tasas de nacimientos y muertes existentes, podemos

deducir que el número de almas en el Infierno crece de forma

exponencial.

Veamos ahora cómo varía el volumen del Infierno.

Según la Ley de Boyle, para que la temperatura y la presión del Infierno se

mantengan estables, el volumen debe expandirse en proporción a la entrada

de almas.

Hay dos posibilidades:

1. Si el Infierno se expande a una velocidad menor que la de entrada

de almas, la temperatura y la presión en el Infierno se incrementarán

hasta que éste se desintegre.

2. Si el Infierno se expande a una velocidad mayor que la de la entrada

de almas, la temperatura y la presión disminuirán hasta que el Infierno se

congele.

¿Qué posibilidad es la verdadera?:

Si aceptamos lo que me dijo Teresa en mi primer año de carrera («hará

frío en el Infierno antes que me acueste contigo»), y teniendo en cuenta que

me acosté con ella ayer noche, la posibilidad número 2 es la verdadera.

Doy por tanto como cierto que el Infierno es exotérmico y que ya está

congelado.

El corolario de esta teoría es que, dado que el Infierno ya está

congelado, ya no acepta más almas y está, por tanto, extinguido…

Dejando al Cielo como única prueba de la existencia de un ser divino,

lo que explica por qué, anoche, Teresa no paraba de gritar «¡Oh, Dios

mío!»

Dicho estudiante fue el único que sacó «sobresaliente».